Se reitera el rechazo de las FPL, al sistema electoral, y se reafirma su compromiso por la lucha revolucionaria. Se insiste en un boicot activo, de parte de toda la población, a las elecciones legislativas de marzo.
Se condena el desarrollo de las elecciones legislativas. Se reafirman las líneas ideologías de las FPL: continuar con la guerra prolongada del pueblo e instaurar el socialismo mediante la revolución armada popular. Se anima a la población a un boicot activo de los comicios. Se conmemora el primer aniversario de la masacre del 28 de febrero. Se informa de las distintas acciones revolucionarias realizadas en el país.
Se acusa a las próximas elecciones legislativas de ser un mecanismo de control y falsa esperanza democrática para la población. Se llama a un boicot activo de los comicios. En lo internacional, se reprocha el accionar represivo de la dictadura somocista en contra de los sandinistas. Se apoya a la lucha combativa nicaragüense y la actividad revolucionaria del EGP. En lo nacional, se conmemora el levantamiento de 1932.
Analiza las elecciones legislativas del 12 de marzo, señalando la naturaleza fraudulenta del proceso electoral: es un medio de permanencia política para las clases dominantes. También, se reprocha el accionar pasivo de los partidos opositores. Se indica qué acciones fueron tomadas, por parte de la población, a fin de boicotear las elecciones.